“Se acabó la excusa del 56% de los votos: la sociedad ya le dio un mensaje claro al Presidente”. señaló el presidente de la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados, Pablo Yedlin en la antesala de la votación en el Congreso en donde se intentará revertir el veto presidencial a la ley que garantizaba fondos al Hospital Garrahan, se refirió a la situación sanitaria, fiscal y política del país:
“El Garrahan es un hospital de excelencia, un faro que no se puede apagar. Solucionar su financiamiento es una decisión política, no un problema fiscal”, aseguró.
El diputado tucumano recordó que el Garrahan atiende cada año a 350.000 chicos de todo el país, de los cuales 3.500 son de Tucumán, que requieren trasplantes, cirugías cardíacas complejas u otros tratamientos de alta especialización.
Además Yedlin cuestionó la gestión de Javier Milei:
“Este gobierno tiene dos años larguísimos por delante. Ojalá hoy escuchen un mensaje fuerte: la Argentina puede tener equilibrio fiscal y, al mismo tiempo, ser un país para todos y no para los de la timba financiera”.
Por otro se refirió a la arbitrariedad del veto presidencial “No hay ninguna explicación sanitaria ni fiscal para este veto. Es un error se lo mire como se lo mire”.
En relación al Presupuesto 2026, Yedlin señaló inconsistencias: “Prometen aumentos nominales que apenas cubren la inflación proyectada, y encima subejecutan lo que tienen. No es solo el presupuesto, es usarlo. Hoy la salud, la discapacidad y las universidades son prioridades que no pueden seguir siendo postergadas”.
Finalmente, reconoció el rol de los trabajadores del hospital en esta lucha: “Los principales héroes de esta jornada son los residentes del Garrahan, que levantaron la bandera y nos obligaron a ir al Congreso con esta ley”.
Yedlin cerró con un mensaje político directo al gobierno: “Esto no es destituyente. Queremos que el gobierno escuche, rectifique y gobierne para todos los argentinos”.